Peter Pan/IGN España

No se trata de ser «Peter Pan», sí de ser

Peter Pan/IGN España

Peter Pan/IGN España

«No se trata de ser eternos «Peter Pan», pero tampoco de dejar de soñar o sorprendernos»

«Peter Pan» como muchos saben es un personaje ficticio, el cual creó el escritor escocés James Matthew Barrie para una obra de teatro que se estrenó el 27 de diciembre de 1904 en Londres y se llamó Peter Pan y Wendy. 

Pan es un niño que nunca crece, tiene diez años y odia el mundo de los adultos, siempre va acompañado de su hada Campanita. Seguramente han visto el «polvo de hada», con ese tiene la capacidad de volar, vive en el país de Nunca Jamás, una isla poblada por piratas, indios, hadas y sirenas. Su familia son los «Niños Perdidos».

¿A qué voy con todo el breviario cultura de «Peter Pan»? 

No sé si alguno de ustedes alguna vez dijo cuando era niño, «quisiera ser adulto para… y nunca dejaré está cualidad». Hoy que muchos ya son adultos con responsabilidades, ¿aún tienen esas cualidades que no querían perder de niños?

Claro ejemplo soñar, ilusionarte, sorprenderte estás tres son cualidades que se van perdiendo conforme cumples años, hasta parece ponen un chip para que uno deje de darle importancia y su valor, porque debo ser sincera las tres junto con muchas más son maravillosas.

Tanto soñar, ilusionarte y sorprenderte ayudan a ver y vivir mejor la vida, cuando dejas de soñar en automático parece pierdes la capacidad de creer en aquello imposible que se puede hacer posible.

Ya sé parece un razonamiento complicado, pero ahí les va la cadena. sueñas, vas creyendo en algo/alguien, te ilusionas algo alimenta tu ser una fuerza que pocas veces sientes llega a ti y después te sorprendes como cuando eras niñ@ de conseguir algo y woooow lo disfrutas como si no hubiera un mañana.

¿Hace cuánto los ojos te dejaron de brillar por solo despertar? Ve recuperando esas ganas de vivir, porque si, sin más porque hoy despertaste y siempre para adelante… Sonríe, coquetea contigo mismo, es más ríe, canta, baila, vuelve a enamorate de quien eres, lo que eras que te gustaba, recuperalo.

«Ser tan adulo como niño, te hace maravilloso y no están peleados uno con otro»