Hay tiempo y también pretextos

Con esta pausa me doy cuenta efectivamente tenemos tiempo y como titulo el post también muchos pretextos, el favorito dejarlo para después o mañana, uno que aparentemente a veces no llega.

A nivel personal como lo estuve compartiendo me doy cuenta efectivamente me encanta poner pretextos sobre la falta de tiempo, cuando en realidad el padre tiempo regala millones de segundos durante el día.

Seguramente algunos dirán, ¿tomaste en cuenta el tráfico y las horas que pasas en el trabajo? Sí, todas están integradas y siendo realista incluso en los «tiempos muertos» en el trabajo, escuela o lugar donde te encuentres puedes tener tiempo para leer, organizar lo que harás saliendo de la oficina (seas empleado o emprendedor).

Hoy en día en casa tengo más trabajo de lo normal (hablo mood Godinez), pero confieso tomando en cuenta a la hora de entrada, salida y llego a casa durante la semana puedo (si así lo quiero) escribir, organizar el contenido de «Una Mirada», hacer ejercicio, pasear a mi enano, entre otras actividades sólo es cuestión de así como me encanta respeten mi tiempo, empezar haciendo lo mismo conmigo.

Deje de hacer cosas no por falta de tiempo, siendo muy realista fue por falta de ganas, por miedo, por siempre ponerme en último lugar.

Ahora no meditaré día y noche, pero sí en las noches; tampoco soy de hacer ejercicio en la mañana soy más de la tarde/noche, leer por supuesto me da tiempo a la hora la comida en mi trabajo o incluso durante el trayecto pero a veces es de ahhh si al rato, y ese al rato nunca llega.

El tema escribir ya sea en el blog, organizar el contenido como se debe, así como en un proyecto que tengo pendiente puedo hacerlo durante treinta minutos tal vez no todos los días porque también es tema de inspiración, pero si mínimo dos o tres veces a la semana.

La falta de tiempo nosotros la creamos, efectivamente porque nos encanta poner eso que tanto anhelamos para después, por poner un ejemplo común con algunas personas siempre es, «nos ponemos de acuerdo» y ese ponerse de acuerdo no llega.

Así que si algo estás aprendiendo con esta pausa, organiza, prioriza y en verdad no te pongas en último lugar.

Gratitud eterna, así defino el 2017

Gratitud eterna/Etiqueta tu vino

«El último del año, un año interesante, en lo personal fue de evolución»

Sin duda alguna el 2017, como lo puse en un post anterior en lo personal fue de muchos retos, muchas pruebas y no solo lo digo por el temblor que fue un extra, más en reajustar algunas cosas en mi para mi.

Arrancarte un sentimiento de tajo, no es un proceso fácil, pero cuando decides hacerlo algo en ti surge, no sé cómo explicarlo pero intentaré ser lo más clara posible. Después de un proceso de rabia, una de las más fuertes que tuve conmigo misma, fui sanando poco a poco algo que quemó, porque así lo permití, porque así puse ese escenario. En fin para no hacerlo más largo de lo que ya no, fui sanando poco a poco, tanto que aprendí a ir paso a paso con todo, justo como me gusta.

Bien dicen que con lo emocional, uno aprende y mucho. En lo laboral puse muy claro lo que quiero y como lo quiero en si en mi vida… Mucho tiempo me detuve por diferentes circunstancias, incluso puse distancia a mucha gente, para poder reconstruirme y tener más claro el panorama, soy una persona transparente, pero cuando entro en diferentes procesos es diferente.

Hoy soy más cautelosa, pero también ya no me callo muchas cosas, digamos volví a ser quien era, de mucha gente me despedí, a muchas otras les di la bienvenida y otras tantas recuperé… Alguna vez alguien me dijo, cuando vives ciertas circunstancias es cuando más comprendes y entiendes el valor de, el valor de tú vida y justo así surgió.

Estuve en cenizas y renací, por eso también me llama la atención el ave fénix, digamos me identifico porque al final del día cuando resurge lo hace con más fuerza y en mi caso decisión. Muchos hábitos los dejé, me encanta ayudar eso nunca lo dejaré hacer, pero para hacerlo tengo que estar bien y empezar por mí, ponerme en último lugar no volveré hacerlo y no por egoísmos, mas por salud mental, emociona, física, espiritual… Un amigo alguna vez me dijo, «para ayudar la otra persona, debe estar dispuesta a recibirla». Y tiene toda la boca llena de razón, a veces queremos ayudar a quien no lo está pidiendo, tal vez lo pidió, pero a veces puede cambiar de opinión, ¿me expliqué?

Volver hacer ejercicio al 100, vaya que ha sido un reto, los pretextos a la orden del día estaba, hasta que por causalidades de la vida, me tope con un grupo maravilloso, mi amado #CírculoVirtuoso con quienes estoy inmensamente agradecida en la vida, porque no solo en lo deportivo, también en ir hacia adelante cuando la gasolina no alcanza me ayudan a ser más positiva y confiar en mi, en verdad mil gracias.

Y justo llego a ese punto de gratitud en redes sociales, gracias a aquellas personas que siguen, llegan y a las que se fueron de mi vida, gracias a cada uno de ustedes porque me ayudan a ser mejor persona, a aceptarme tal y como soy, a no rendirme cuando quiero tirar todo y decir me rindo.

Gracias a cada uno de ustedes que me lee, me sigue, me toca, me inspira, me reta, uffff tantas y tantas cosas, de todo corazón mil gracias, no tienen idea lo importantes que son, gracias a esas voces que me ayudan a no rendirme en la escritura, en exigirme la entrada cada lunes, miércoles o viernes, a quienes cuando empiezo a creer no vale mi tiempo estar con el blog, de pronto llega un mensaje por el propio blog, FB, WA, TW o incluso IG y me dicen sus comentarios, en verdad alimentan mi espíritu.

Tengo tanto por agradecer que no me alcanzaría este espacio, pero hay que si agradezco y es estar decidida a luchar por lo que quiero y quienes amo, vencí temores absurdos y otros tantos valiosos. Vencí mi temor a las cucarachas, ratones, alturas, estoy en el proceso de agujas aún no llego ese anhelado tatuaje pero llegará, solo falta ese, al movimiento del piso donde estoy y el sonido de las sirenas, así como de la alarma sísmica, comprendí como lo pusieron en un video que me hicieron favor de compartir que ello existe para advertirte y ayudar a quien lo necesita.

Como les comenté este año, ¡vaya que fue de retos por cumplir, enfrentar y superar! Pero hubo algo que me encanto descubrir y es que hoy estoy en paz conmigo misma y eso no lo cambio por nada del mundo.

No toque a mi familia al inicio, pero siempre están al frente de todo y hablo de mi mamá, papá, hermano y enano (Jack) principalmente, obviamente mi familia de vida está más que incluida, pero esas líneas son para cada uno a quienes de una forma siempre son y están.

Mi trabajo actual, no sé qué haría, aprendo cada día y si algo aprendí es a no despreciar ninguna profesión, porque al final del día todas existen por algo y vaya que cada uno tiene su reto especial.

«Por un 2018, por más sueños que cumplir, más bendiciones por agradecer y más retos por superar»