Profuturo, es tiempo de creer en el futuro

Tiempo de creer

Hace poco ví por televisión (si aún soy de ese grupo) el comercial de Profuturo. A continuación comparto.

El lema es el siguiente, es tiempo de creer en el futuro, en verdad me pareció hermoso.

En el comercial puedes ver el nacimiento de diferentes bebés, incluso cuentan una breve historia de cada uno y mencionan, «son los bebés que acaban de llegar y son geniales, porque para haber nacido en un presente tan incierto, ¡vaya que son especiales! Son el futuro.

Porque si a pesar de todo la nueva vida no se detiene, nuestro futuro tampoco…» Confieso se me enchinó la piel e incluso los ojos se llenaron de lágrimas por el mensaje colmado de esperanza, armonía, amor, dicha, felicidad, entusiasmo.

¿Sabes algo? Tú también eres parte de este presente y futuro maravilloso siempre y cuando decidas vivirlo así, hoy tú puedes hacer la diferencia aunque te llamen loco, irreverente, tonto, entre otras… Hoy eres valiente y especial por estar aquí, a lo mejor eres el aparentemente raro que decidió vivir de un modo diferente esta pausa ya sea emprendiendo, haciendo viajes a tu interior, animando a tu familia y seres queridos, tomando terapia, limpiando todos los rincones de tú casa y entorno, invitando a los vecinos a unirse para enviar buena vibra, entre otros.

Tanto los bebés que están naciendo, como cada uno de los seres que habitan este Planeta son seres valientes, por no rendirse y continuar en esta aventura llamada vida.

Más que una nueva normalidad, ¡doy la bienvenida a la nueva realidad, a este renacer!

El precio del mañana/Sitio Oficial

«El precio del mañana», puede ser demasiado tarde

Cuando salió la película El precio del mañana protagonizada por Justin Timberlake por supuesto fui a verla al cine, en ese entonces me quedé sólo con equis idea y listo… Hace algunos días la pasaron por televisión no pude evitar cuestionar, ¿alguna vez llegaremos a eso, en vez de pagar con dinero hacerlo con tiempo?

Sin espero spoilear la trama del filme tienes todo el tiempo del mundo, al grado de poder compartirlo, cuando tienes la oportunidad de salvar a una personas resulta por segundos pierdes esa oportunidad. Ahora en vez de pedir fiado y en la quincena pagar, suplicar por esos minutos y te digan no, tomar la decisión de irte caminando y cuando estás frente a la persona que quieres abrazar, por segundos no pudiste y pierdes la vida no por una enfermedad, sí por falta de tiempo.

La semana pasada estuve pensando en la trama sobre la posibilidad, ahora con lo que estamos viviendo siendo muy franca estoy muy lejos de continuar diciendo no tengo tiempo y darme permiso para acudir a lo que quiero y no quiero… Ahora lo cambio con tengo salud y todo el tiempo del mundo para mí y quienes me acompañan.

Afortunadamente o desafortunadamente (según la perspectiva de cada quien) no pagas con tiempo, sí con efectivo, pero en verdad invierte esos minutos en aquello que te gusta, en convivir con la familia y amigos, en consentirte, en lo que te apasiona… La vida no sólo es trabajo-casa, casa-trabajo, también tiene más ofertas que es ir al cine, ir a comer, ir a cenar, estar en tu casa viendo Netflix, estar en tu casa platicando con tus papás, pareja, hijos; estar contigo disfrutando el silencio, estar con tu mascota, salir a caminar, hacer ejercicio en fin la lista es infinita.

El tiempo y la salud son grandes aliados, ¿puedes moverte?, ¿puedes ver?, ¿puedes escuchar?, ¿puedes? Entonces no desperdicies ningún mili segundo e invierte en ti y los tuyos.

"Cada cabeza es un mundo, así como cada corazón"/Facebook

«Cada cabeza es un mundo, así como cada corazón»

"Cada cabeza es un mundo, así como cada corazón"/Facebook

«Cada cabeza es un mundo, así como cada corazón»/Facebook

No sé desde cuando mi cabeza y corazón empiezan a crear ciertos refranes o mejor dicho frases, ¿qué tan buenos o no sean?, desde hace mucho ese punto dejo de ser relevante y se convirtió en una afirmación que en lo personal me ha ayudado mucho a entender pero más respetar a cada ser que tengo en mi vida o se cruza en ella.

Se trata de: «Cada cabeza es un mundo, así como cada corazón», efectivamente si eso en verdad nos pusiéramos a pensar y sentir antes de decir cualquier cosa sea verdad o mentira como seres humanos nos evitaríamos un sinfín de mal entendidos.

Y lo digo porque me he dado cuenta que a veces no se trata de que te pongas en los zapatos de la otra persona, pero sí que aunque no estés de acuerdo respetar su forma de ser.

Afortunadamente existen personas que si lo hacen, son aquellas que te darán su opinión que nunca sentirás como juicio, si como una palabra de aliento e incluso acción que te impulsará a salir adelante y sacar tu sentir, pero después de ello dirás «ok todo tranquilo y seguiré mi camino».

También existe el lado B, ese que te pueden dar su opinión pero siempre pensando en ellos, olvidándose aunque te digan lo contrario de tu sentir, hasta que de pronto se encuentran viviendo una situación parecida, pero que aprovechan para ser el centro de atención y de todos modos echarle la culpa a todo el mundo, decir que todo está pésimo, desear que el día, mes o año termine; en fin armar un circo de tres pistas impresionante.

Ese tipo de personas tal vez te quieran a su modo, uno que algunas veces siendo sincera no es el adecuado pero del cual por «x» o «y» razón es el que acostumbran.

Creo a veces cuando uno vive determinada situación, efectivamente no siempre entenderás por lo que está pasando esa persona pero si respetaras y esa será tu forma de apoyar e incluso ayudar porque lo que menos necesita esa persona es que alguien más le traiga más conflictos a su cabeza y corazón de los que ya está viviendo y sintiendo.

A lo largo de mi vida siendo franca estuve también en este lado B, cuando veía que alguien estaba mal pero ahhhh no hacía todo lo posible para ser el centro de atención y lo peor «voltear la tortilla», es decir hacer sentir mal a la persona que según quería, afortunadamente abrí los ojos, me di cuenta que lo que estaba haciendo no estaba bien y después de hablar con las personas que lastime cambie al 100 mi forma de ser al respecto.

Y entendí que que efectivamente tal vez a ese tipo de personas muchas veces les permitimos tanto porque nos cegamos por el cariño que les tenemos, algo justificable y no porque cuando quieres también se tiene la tarea de su darle ánimos, pero incluidos de un mucho de realismo y hablarles claro.

¿Mi consejo? No traten de ser siempre el centro de atención de las personas que quieren, ellos a su modo estarán siempre con ustedes, créanme que si los siguen presionando lo único que van a conseguir tarde que temprano es que salgan por la puerta sin importar que sea minúscula… Respeten la forma de ser y sentir de cada persona y si se encuentran con extremistas aunque los quieran mucho si no les hace bien, aléjense.

Cuesta pero afortunadamente no es algo imposible y su paz vale mucho más.